A través de libro que integra las experiencias y técnicas aplicables en la búsqueda de
personas desaparecidas
La Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Jalisco (COBUPEJ) y el Museo de
Ciencias Ambientales (MCA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) presentaron a
ocho colectivos ciudadanos de búsqueda de personas desaparecidas los resultados de
las investigaciones científicas del libro Interpretando la naturaleza para encontrar a
quienes nos faltan: ciencias biológicas, físicas y de la tierra aplicadas a la detección de
inhumaciones clandestinas.
El trabajo es producto de la colaboración del Gobierno de Jalisco, la UdeG, el Centro de
Investigación en Ciencias de Información Geoespacial (CentroGeo) del Consejo
Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), la Universidad
Politécnica de la Zona Metropolitana de Guadalajara y las universidades de Oxford y
Bristol.
En los 20 capítulos se refleja la labor de medio centenar de especialistas en 15
diferentes disciplinas, como la botánica, la entomología, el estudio de suelos, la ecología
de fauna o la ecología del paisaje.
Entre las y los autores del libro figuran nueve investigadoras e investigadores de los
centros universitarios de Tonalá (CUTonalá), de Tlajomulco (CUTlajo), de la Costa Sur
(CUCSur) y de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA).
La reunión para compartir los resultados se llevó a cabo en el Instituto Transdisciplinar
de Investigación y Servicios (ITRANS) e incluyó una exhibición del “Laboratorio
Didáctico” que creó la COBUPEJ con la asesoría del MCA para explicar las técnicas
aplicadas de investigación científica.
También se presentaron los denominados “Espacios de Experimentación Forense”,
ubicados en el CUTonalá y en la Universidad Politécnica de Tlajomulco, donde se
enterraron 32 cerdos en diferentes condiciones (enteros, seccionados, quemados, en
bolsas plásticas, con cemento) para estudiar los proceso de descomposición y de
detección.
Las presentaciones institucionales corrieron a cargo de Víctor Hugo Ávila Barrientos,
comisionado del COBUPREJ; Gustavo Quezada Esparza, director general del Instituto
Jalisciense de Ciencias Forenses y Ruth Padilla Muñoz, directora del ITRANS.
Además, se contó con la participación del doctor José Luis Silván Cárdenas,
investigador del CentroGeo y el maestro Tunuari Chávez González, director de Análisis y
Contexto de la COBUPEJ, quien fue coordinador del proceso de construcción de
alianzas, investigación y producción del libro.
Por otra parte, la doctora Denise Ayala Hernández, jefa del Departamento de Justicia
Alternativa y Ciencias Forenses del CUTonalá, y el doctor Eduardo Santana Castellón,
director del MCA, fungieron como enlaces interinstitucionales.
Ciencia hecha por la ciudadanía
En este encuentro el doctor Santana Castellón, maestro emérito de la UdeG, presentó
los resultados de los capítulos “Saberes nacidos del dolor: conocimientos y propuestas
de las madres buscadoras”, y “Madres buscadoras hacen ciencia ciudadana”.
Para escribir estos capítulos se realizaron entrevistas a madres buscadoras y se
integraron las experiencias de los coautores de la COBUPREJ, quienes han trabajado
con un centenar de familiares de personas desaparecidas en más de 200 búsquedas de
campo y análisis de contexto de fosas clandestinas.
“Si bien el libro trata sobre cómo encontrar fosas clandestinas, el objetivo de nuestra
sociedad no debe ser lograr una mayor eficiencia en la búsqueda de personas
desaparecidas, sino evitar que se produzcan desapariciones. Las desapariciones son
síntomas de una sociedad en crisis, enferma, tanto material como moralmente”, sostuvo
el doctor Santana.
En los trabajos se demuestra que la actividad de las madres buscadoras se debe
calificar como un caso especial de “ciencia forense ciudadana”, según los criterios
establecidos por la Unión Europea de Ciencia Ciudadana.
“A pesar de los reconocidos aportes de los colectivos ciudadanos de búsqueda, es al
Estado a quien corresponden las responsabilidades ineludibles de prevenir las
desapariciones, realizar investigaciones y sancionar a los responsables”, abundó el
director del MCA.
Santana Castellón señaló que entre las aportaciones y logros de los colectivos se
incluyó el descubrimiento de unas cuatro mil 400 fosas producto de la información de los
colectivos, el desarrollo de nuevas estructuras organizativas para emprender búsquedas
de forma autómata o la reflexión para inducir a que se iniciaran investigaciones
científicas forenses.
Así como el impulso a cambios legislativos y de políticas públicas federales y estatales,
la contribución para incrementar la transparencia y rendición de cuentas del gobierno, o
la creación de nuevos mecanismos de gobernanza con mayor participación ciudadana,
mejor planificación y la implementación de acciones de seguridad ciudadana y de
gestión de programas sociales.
Con estas aportaciones se contribuyó a que México alcance 10 de las 12 metas del
Objetivo de Desarrollo Sostenible 12 “Paz, Justicia e Instituciones Sólidas”, y una meta
del Objetivo 5 “Igualdad de Género”.
“El gran desafío es cubrir las necesidades básicas materiales e intangibles de los
ciudadanos, abordando la pobreza, el empleo, la educación, la salud mental, las
adicciones, la corrupción y la integración de marcos de acción éticos/morales para
construir comunidades solidarias y participativas”, precisó Santana.
Durante esta reunión las madres buscadoras agradecieron el trabajo de las instancias
colaboradoras para generar nuevas formas de encontrar a sus seres queridos y
enfatizaron el apoyo que les ha brindado la COBUPEJ.