Tras múltiples esfuerzos entre Chile y la UdeG, llega por primera vez a nuestro país la
obra visual de estas dos artistas
Por primera vez en la historia, México recibe y muestra la obra visual de la artista chilena
Violeta Parra (1917-1967), misma que conversa con las creaciones pictóricas de la
compositora y artista Mon Laferte en la exposición Recolectoras, que podrá apreciarse
en el Museo de las Artes (MUSA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) como parte
de las actividades de la Feria Internacional de la Música (FIM).
La artista chileno-mexicana Mon Laferte, en rueda de prensa en el Museo de las Artes
de esta Casa de Estudio, expresó cómo la rebeldía y personalidad de Violeta ha
inspirado parte importante de su quehacer artístico, por lo que esta invitación ha sido
para ella una oportunidad de agradecer y homenajear.
“Me emociona mucho esta exposición, aunque confieso que me hace sentir como una
intrusa. Violeta es la artista más grande que ha parido Chile, así que espero estar a la
altura. Todo mi arte fue creado para ella con todo mi amor. De alguna manera, podría
decir que soy su hija, puesto que ella es la inspiración más grande y la madre de todos y
todas las artistas que creamos música en Chile”, compartió.
Dijo sentirse emocionada por participar en el concierto Portamérica Latitudes el próximo
1 de marzo, donde presentará un extenso recorrido de toda su creación musical; según
mencionó, tal vez sea el escenario perfecto para mostrar un adelanto de una nueva
canción.
Javiera Parra, cantante y nieta de Violeta Parra, agradeció la apertura de México al
recibir y exponer el legado de su abuela, que ha repercutido generacionalmente en
Chile, pero no tanto en América Latina.
“Me gusta pensar que esta exposición es un adentramiento al «planeta Parra», porque
tiene todo, tiene su música y su obra visual. Una de las cosas que unen a Mon y a
Violeta es la rebeldía y los contextos duros que tuvieron que enfrentar y con los que
lograron crear cosas hermosas”, expresó.
La doctora Margarita Hernández Ortiz, coordinadora general de Extensión y Difusión
Cultural de la UdeG, dijo sentirse muy orgullosa por los esfuerzos logrados entre Chile y
esta Casa de Estudio para traer por primera vez la obra visual de Violeta Parra a nuestro
país.
“La UdeG refrenda el crecimiento de la industria de las artes para llevarla a la sociedad
en general y a la comunidad universitaria”, comentó.
Beatriz Sánchez, embajadora de Chile en México, enfatizó en la importancia de esta
exposición, que muestra obra de dos mujeres artistas chilenas multifacéticas y
apasionadas, quienes, según comentó, han representado dignamente la cultura chilena
en el mundo: “Esta exposición alberga un pedazo muy grande de Chile; esto es lo que
somos”, agregó.
“Violeta Parra ha sido una fuente de inspiración muy grande para los artistas
latinoamericanos y su participación en dicha exposición marca una experiencia única y
posiciona aún más al MUSA como un lugar de encuentro para el diálogo entre la pintura,
el arte y la música como un arma de resistencia. Esta exposición resalta la tradición de
Chile y establece un puente entre el pasado y el presente”, dijo la maestra Maribel
Arteaga Garibay, directora del MUSA.
Denise Elphick, directora ejecutiva del Museo Violeta Parra, en Chile, dijo sentirse
emocionada por el resultado, que beneficiará las relaciones culturales entre México y
Chile; además, reconoció la humildad como un factor que une a la obra de Mon Laferte y
Violeta en Recolectoras: “Violeta recorrió todo Chile y trabajó con mujeres del campo
chileno para crear sus obras visuales y musicales; siempre fue generosa y cercana a la
gente. La cultura debería siempre empezar por ahí, por compartir lo que se crea”,
subrayó Elphick.
Beatriz Bustos, curadora de la exposición, invitó a visitar el MUSA y a adentrarse entre la
conversación compleja de Violeta y Mon mediante sus obras visuales. El lenguaje de
ambas, dijo, se compagina perfectamente debido a sus pasiones y las necesidades de
expresar su sentir con respecto a la lucha de clases, el género y las desigualdades,
creando obras reflexivas y de diálogo extenso con el público.
Recolectoras, un diálogo vigente entre el pasado y el presente
Lo primero que puedes visualizar al entrar a la sala que alberga la exposición
Recolectoras es una muñeca enorme y visiblemente triste, compuesta por una escala de
grises, hecha por Mon Laferte, y la cual se encuentra junto a la letra de “Maldigo del alto
cielo” de Violeta Parra: “Maldigo todo lo cierto, lo falso con lo dudoso, cuánto será mi
dolor”.
Recolectoras, que está dividida en dos secciones, muestra en una primera parte
fotografías, videos, viniles y textos que engloban el contexto social y artístico en la que
las artistas comenzaron a desempeñar sus quehaceres creativos: “Con más de 50 años
de distancia, Violeta y Mon captan los sentires y pulsaciones de quienes nacimos en
América. Violeta dio voz a la lucha de los campesinos, a la lucha de clases y el mundo
indígena; por su parte, Mon, en un mundo más contemporáneo, busca resaltar la lucha
de las mujeres vulneradas”, mencionó Beatriz Bustos.
Después, comienza el recorrido por sus obras visuales, las cuales se componen de
retratos pictóricos y arpilleras (técnica de bordado nacida durante la dictadura chilena),
en donde los espectadores podrán encontrar reconocidas obras de Parra como “La
huelga de los campesinos” y “La brujita”, además de las obras creadas por Mon Laferte,
hechas exclusivamente para conversar con la obra de Violeta.
“Para crear las arpilleras, Mon se basó en historias de mujeres chilenas; algunas fueron
víctimas directas de la dictadura, otras simplemente le contaron sus vidas, sus historias
dolorosas y vulnerables. Ella dibujaba lo que le contaban y luego les pidió a estas
mujeres que bordaran sus historias, y como resultado tenemos estos trabajos coloridos y
sanadores que mantienen ese diálogo de lucha con el arte de Violeta”, comentó Bustos.
Para complementar el recorrido, el MUSA ofrecerá a sus visitantes un reproductor de
música, el cual contiene tres canciones de Mon Laferte y tres de Violeta Parra, mismas
que pretenden crear una atmósfera transdisciplinaria para los visitantes. Recolectoras
estará disponible en el MUSA del 26 de febrero al 11 de mayo.